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Adaptabilidad y agilidad para automatización end-to-end

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El uso de plataformas low-code/no-code/pro-code permite una colaboración multifuncional más productiva entre Negocio y los equipos de TI, un time-to-market más rápido y la resolución de procesos transversales complejos, al poder implementar código personalizado cuando se necesite.

La requerida agilidad del negocio en el ecosistema cambiante y competitivo actual obliga a las organizaciones a marcarse como objetivo prioritario ser más adaptables a las necesidades de sus clientes y a la dinámica del mercado. Esto les lleva a poner el foco en plataformas low-code/no-code cuando se trata de disponer de una aplicación BPM rápida para la gestión de sus procesos. Sin embargo, en el caso de aplicaciones de misión crítica con orientación al cliente necesitan incorporar funcionalidades complejas desarrolladas por TI, porque no pueden desarrollarse directamente dentro de ese entorno de código bajo.

Para facilitar que las aplicaciones low-code pueden embeber esas funcionalidades complejas se aplica la metodología del desarrollo basado en componentes o CBD (Component Based Development), que revolucionó el desarrollo de software a finales del siglo XX, y que actualmente ha evolucionado a la metodología denominada composability (componibilidad), potenciando la portabilidad e interoperabilidad de los componentes. Este paradigma permite la reutilización de componentes autónomos (sin afectar a otros componentes o aplicaciones) mediante la llamada a cualquier servicio o componente desde la aplicación low-code. Lo que busca en última instancia es garantizar la funcionalidad óptima de las aplicaciones de digitalización de procesos aprovechando los mejores componentes probados para crear nuevas aplicaciones de procesos automatizados con la mejor y máxima funcionalidad requerida. Con esto, el concepto de componibilidad trasciende más allá del puro desarrollo de software y Gartner habla en general de componibilidad empresarial, haciendo referencia no solo al desarrollo de las aplicaciones, que sin duda son el núcleo de las empresas componibles, sino también al pensamiento y las estructuras organizativas, de gobierno, procesos y la cultura de las empresas.

Pilares y principios de la empresa componible

La componibilidad empresarial es una forma de planificar, organizar y operar basada en el reensamblaje de componentes modulares en nuevas capacidades y flujos de trabajo empresariales. El diseño modular, el principio clave de la componibilidad, permite que los aspectos del negocio más volátiles (que no podrían haberse cambiado en el pasado de forma sencilla) se ajusten fácilmente para impulsar el valor empresarial que se requiera.

La componibilidad, que es un paso más para las empresas en la digitalización del negocio, debe abarcar según Gartner tres pilares claves:

  • Pensamiento componible en la cultura de la organización: enfatizando el ensamblaje y reensamblaje de componentes. Todo es modular y susceptible de ser cambiado. El cambio es una oportunidad y no una amenaza.

  • Arquitectura empresarial componible, que garantiza una organización flexible y resistente: Lograr la digitalización requerida es posible mediante una plataforma que facilite maximizar la capacidad de construir, ensamblar y volver a ensamblar diferentes elementos modulares de negocio.

  • Tecnología componible: comprende activos digitales empaquetados como componentes autónomos que ofrecen un valor empresarial independiente, claro y completo, y están diseñados como bloques de construcción para el ensamblaje y reensamblaje dentro de los procesos de negocio.

Paralelamente, un negocio digital componible debe aplicar alguno de los cuatro principios básicos de la componibilidad para gestionar con resiliencia y alcanzar un valor empresarial aún sin explotar. Esos principios son:

  • Modularidad: disponer de componentes autónomos que recojan las capacidades de negocio necesarias para facilitar su uso en diferentes aplicaciones y casos de uso, ofreciendo la máxima flexibilidad, escalabilidad y control de cambios.

  • Orquestación: construir componentes con foco en su interacción basada en estándares.

  • Descubrimiento: los componentes son identificados, monitorizados y gestionados, aportando rapidez.

  • Autonomía: construir componentes intercambiables sin afectar al sistema, proporcionando integridad completa.

Automatización end-to-end gracias a los mejores componentes, autónomos y portables

El actual diseño basado en componentes (componibilidad) facilita la interoperabilidad y portabilidad mediante interfaces estandarizadas de servicio que terceros ponen a disposición de cualquiera en bibliotecas, con independencia de cómo se han programado. Así al digitalizar un proceso de negocio mediante el desarrollo de una aplicación en un BPMS se pueden tomar los componentes autónomos (microservicios) necesarios para disponer de la funcionalidad requerida.

En este sentido, se deben evitar plataformas BPMS monolíticas, porque nos enfrentaremos a la problemática de la incompatibilidad de la plataforma BPMS low-code con componentes autónomos externos, de diferentes proveedores, no permitiendo por tanto usar nada fuera de las capacidades inseparablemente acopladas que brindan en su plataforma o requiriendo una compleja integración.

Una buena práctica, por tanto, para realizar una automatización de extremo a extremo (end-to-end) con éxito es componer la solución empresarial a partir de una biblioteca de los mejores componentes portables, utilizando para ello una plataforma que facilite la interoperabilidad (integración y coordinación) necesaria para poder realizar la combinación óptima de componentes autónomos (internos y externos) según las necesidades en la digitalización de los procesos de negocio.

En cuanto a los beneficios, el desarrollo por componentes ofrece a cualquier organización que se plantee la digitalización y automatización end-to-end importantes ventajas como:

  • Simplificación y reducción de costes, gracias a la reutilización de componentes.

  • Adaptabilidad a las necesidades cambiantes, con capacidad de adoptar nuevas tecnologías y estando configuradas para poder cambiar rápidamente a nuevas tecnologías.

  • Innovación abierta, al tomar los mejores componentes externos desarrollados por expertos externos a la organización.

La componibilidad facilita a las empresas la máxima productividad en la implementación para conseguir un time-to-market rápido y así lo muestran algunos ejemplos:

  • La financiera SEBA ahorró en tiempo de automatización de tareas manuales de sus operaciones de servicios financieros integrándose con sus sistemas existentes.

  • Swiss SDX implementó rápidamente la digitalización de sus procesos complejos como el onboarding de clientes, con interacción multicanal, integrándose con la infraestructura existente.

  • Kindred Credit Union automatizó en solo 5 días su proceso de préstamos de emergencia. Kindred aprovechó la funcionalidad de generación de plantillas de Flowable, para crear automáticamente documentos de acuerdos de préstamo específicos para miembros, que luego se enviaron para su firma electrónica. Esta funcionalidad de plantilla proporcionó una reducción adicional en el procesamiento de préstamos y en el tiempo de respuesta.

A modo de conclusión, tal y como indica el estudio de Gartner "2022 Gartner CIO and Technology Executive Survey", las organizaciones que demuestran una alta componibilidad están, de media, dos años por delante de sus competidores en los esfuerzos de transformación digital y pueden mejorar su rendimiento comercial en tiempos de volatilidad. La incorporación del desarrollo por componentes en la digitalización de procesos permite que cualquier organización cambie y crezca a pesar de la incertidumbre y volatilidad persistente.

Pedro Robledo

Como presidente y cofundador de la sección española de ABPMP International, es uno de los representantes más influyentes en el campo de la gestión de procesos con BPM (Business Process Management).